lunes, 3 de noviembre de 2014

Vuelta






Gris.....el color impera en la mañana aún no besada por un sol que ya se resiste a perder su encanto, parece que el estío ya quiere  perecer.

Siempre amanece por el este, donde acaban los sueños y empieza el momento justo de esforzarse para hacerlos realidad.

Y pensaré cada palabra que haya oído para alentarme,  aunque la madrugada aceche entre sombras y se engulla las horas. Cuanto más es el deseo del descanso, más grande es el ansia de no dejar que el sueño nos venza.

Octubre nos ha dejado, Noviembre, mi mes tan dulce, el tránsito de la  rutina, de cumplir un número más en la cifra que ya marca,  se convierte en el mes de referencia para iniciar un nuevo año, nueva vida.

El otoño se adentra como un soplido en la vida, una bocanada de aire fresco, nuevos horizontes que se abren en la senda de hojas caídas de árboles que mudan su corteza.


No perder de vista el camino, pero no dejar de mirar las orillas, quizá encuentres cosas maravillosas dejadas por otros que ya recorrieron antes tus pasos.

Por mucho que te enfades contigo, eres tu mayor crítico, el más despiadado, pero al que no puedes contradecir. Ahí radica el trabajo, en el cambio

Y éste puede encontrase en un cruce, en una chispa, en un momento que no esperabas, en un detalle sin sentido.

Al fin y al cabo sólo somos una edición limitada de nosotros mismos. No importa cómo sopla el viento, lo importante es cómo colocamos las velas.

Vive, viaja, estudia, trabaja, sueña....pero hazlo. No seas un autómata en el día a día, escapa de tu propia realidad y crea un mundo ajeno para perseguirlo.

Y respirarás cada mañana esa brisa llena de aliento y todo se volverá luz. Sólo tú. 
Tú y tu coraje. El mejor equipo.